Según el Consejo de Monumentos Nacionales, se encontró evidencia sobre el modo de vida de los habitantes de Santiago en los períodos prehispánico, colonial y republicano.
En octubre del año pasado, la concesión para Américo Vespucio II (AVO II), que contempla una autopista subterránea de 5,2 km desde Príncipe de Gales hasta Los Presidentes, pasando por La Reina, Ñuñoa, Peñalolén y Macul, obtuvo su Resolución de Calificación Ambiental. Con ello, comenzaron varios trabajos que se deben hacer antes del inicio de las obras de construcción, como son los trámites de expropiaciones y prospecciones arqueológicas.
En eso han estado empeñadas distintas entidades durante los últimos meses, razón por la que desde febrero hay sectores donde se ha visto una reducción en las pistas, generando congestión vehicular en algunos puntos.
La autopista de Vespucio Oriente II permitirá cerrar el 'anillo' de la circunvalación de Santiago, lo que, según la Dirección General de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas (DGC), 'generará un impacto positivo a la ciudad de Santiago'.
Trabajos en la zona
Las obras de construcción previas, de acuerdo con el cronograma disponible en la página del proyecto, debían partir en julio, sin embargo, eso ya no corre.
Si bien desde la Sociedad Concesionaria Américo Vespucio II y la DGC aseguran que no hay atrasos en el proyecto, conocedores de la iniciativa dicen que debido a hallazgos arqueológicos los plazos por ahora son inciertos, ya que no pueden iniciarse dichas faenas hasta que esas labores terminen.
La DGC afirma que 'se espera que la obra comience a construirse durante el segundo semestre de este año y que concluya en 2028', y que están desarrollando actividades preliminares mandatadas en la Resolución de Calificación Ambiental, como prospecciones arqueológicas, tomas de posesión material de terrenos expropiados, implementación del plan de relocalización y cambio de servicios.
El factor arqueológico es materia del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), que detalla que durante la evaluación ambiental 'se solicitó la excavación de pozos de sondeo, con el objetivo de evaluar la presencia de sitios arqueológicos en la zona. Así, se identificó un conjunto de hallazgos arqueológicos con diferentes características y temporalidades'.
'La relevancia de cada uno de estos hallazgos es de un importante valor patrimonial, debido a que corresponden a información y evidencia que dan cuenta de los modos de vida de las poblaciones que habitaron la ciudad de Santiago durante el período Prehispánico y durante el período Colonial y Republicano. Asimismo, permite rescatar contextos sumamente relevantes en términos simbólicos, tales como el hallazgo de un contexto de inhumación humana, el cual se hubiera perdido por completo si no se hubieran ejecutado estas actividades arqueológicas'.
Por ello, continúa el CMN, se solicitó un rescate arqueológico: 'Una vez que los sitios sean rescatados, se podrá dar continuidad a las obras en cada uno de estos sectores. Los plazos estimados para la ejecución de estos trabajos pueden variar de seis meses o un año, o más, dependiendo de la priorización que le otorgue el titular'.
Óscar Acuña, exsecretario ejecutivo del CMN, comenta que ese es el problema con estos proyectos: 'Habitualmente te van a pedir una línea de base arqueológica. Para tenerla, primero tienes que contratar al arqueólogo, él va a ser un presupuesto, una vez que se lo aprobaron, va a hacer una solicitud ante el Consejo de Monumentos para hacer la línea de base, que implica hacer pozos de sondeo. Y el Consejo, en dar el permiso, de acuerdo al reglamento, debería demorarse 60 días hábiles, pero se está demorando entre seis o siete meses'.
Y agrega: 'Con ese permiso recién el arqueólogo puede ir a terreno a hacer los hoyos. Luego hace su informe, el que luego tiene que revisar para aprobarlo el consejo, si es que no tiene reparos en él. ¿Y cuánto se demora en aprobarlo? Otros seis meses. Después de que eso esté aprobado, te puede dar la autorización para el rescate arqueológico, si es que había algo, que son otros seis meses'.
'El Mercurio' consultó con la concesionaria más detalle de los plazos y futuras obras, pero no obtuvo respuesta.
Fuente: El Mercurio