En la industria lamentan la demora en el pago del mecanismo para compensar proyectos que se realizan directo a través de la cartera de Salud. En tanto, el MOP dice estar revisando el tema con las concesionarias.
Preocupados están en el sector de la construcción por el futuro de las nuevas obras hospitalarias que están en desarrollo y que aún no perciben una solución concreta de parte del Estado al impacto del alza de los costos de los materiales, que se dispararon tras la pandemia.
Son cerca de 35 hospitales que se construyen a través del sistema de concesiones de obras públicas o directamente por el Ministerio de Salud (Minsal), los que podrían enfrentar riesgo en la continuidad de sus obras.
Lo anterior, debido a que en el caso de los recintos concesionados —18 en total, que suman unas cuatro mil camas– no existe sistema de reajuste de contratos que mitigue el alza de precios de materiales. En tanto, para los hospitales que se construyen directamente vía Minsal, se promulgó en marzo de este año el decreto supremo 304, de los ministerios de Hacienda y Desarrollo Social, que reconoce un tope del 20% del valor del proyecto, pero cuyo pago aún no comienza, afirman en la industria.
El DS 304 es semejante al DS 177 del MOP, promulgado en octubre de 2022 y que ya está operando y ayudando a las obras públicas que realiza el Ministerio de Obras Públicas. Pero en el sector de la construcción acusan que el decreto ligado a los establecimientos vía Minsal tiene un polinomio más desventajoso que el del MOP.
El vicepresidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Alfredo Echavarría, admitió que aún no comienzan los pagos de reajustes de los proyectos del Minsal, aunque espera que ello ocurra pronto.
Respecto de los hospitales concesionados, indicó que no existe ningún plan de reajuste aún, pero reconoció que se iniciaron algunas conversaciones con el MOP para buscar un mecanismo de compensación por aumentos de costos. “Es un problema que a ciertas concesiones les ha pegado muy fuerte. La Red del Maule, por ejemplo, fue estudiada, presentada y adjudicada antes de estas alzas de precios y está iniciando la construcción ahora”, indicó Echavarría.
Afirmó que las constructoras ligadas a proyectos del Minsal y las concesionarias están expectantes. Echavarría añadió que “si no se busca una solución, podría haber algún riesgo de que alguna (empresa) no pueda terminar las obras. Entonces, creo que es un tema que hay que solucionar”.
El presidente de la Asociación de Concesionarios de Obras de Infraestructura Pública (Copsa), Leonardo Daneri, admitió que “estamos todos preocupados”. Sobre la posibilidad de un reajuste similar a los que se gestaron para las obras públicas directas del MOP, afirmó que, “evidentemente, los hospitales construidos por concesiones siguen siendo hospitales. A igual condición igual disposición, es decir, dado que las condiciones son las mismas, independiente del modo de construcción, se dispuso arreglar el problema y no vemos por qué debe ser distinto en las concesiones, que son obras públicas de pago diferido”.
Desde el Ministerio de Obras Públicas admitieron que recibieron un planteamiento de Copsa, “el que se encuentra en revisión. No obstante, la situación debe abordarse caso a caso para evaluar los eventuales impactos en cada contrato. Se está a la espera de la entrega de antecedentes por parte de las empresas para realizar los análisis respectivos”.
Actores que construyen recintos de salud en relación directa con el Minsal manifestaron su inquietud por este tema.
Fuentes de la empresa Astaldi indicaron que el nuevo Hospital de Linares, que con más de 30% de avance en total y 80% de progreso en su obra gruesa es uno de varios proyectos que la compañía desarrolla en Chile, se encuentra a la espera de una solución por parte de la autoridad.
Dichas fuentes agregaron que en la firma existe confianza en que la autoridad, después de meses, destrabará los asuntos administrativos pendientes y entregará una solución, “que permitirá que la comunidad cuente prontamente con este necesario recinto de alta complejidad”.
Marcos Retamal, gerente general de Moller y Pérez-Cotapos, comentó que la constructora no tiene proyectos hospitalarios bajo el modelo de concesión, pero sí posee dos obras, “donde sí deben pagarse nuestros mayores costos mediante el DS 304, los hospitales de Higueras (Talcahuano) y Queilen (Chiloé), y estamos preocupados por las demoras en aplicar el mecanismo”.
Retamal añadió que “consideramos que concurre una asimetría respecto al MOP, que ya compensó a fines del 2022. Nuestras construcciones, mucho más críticas, no han sido resueltas, y está en entredicho su debida conclusión. Esperamos que esto se solucione a la brevedad”.
Según datos de la CChC, actualmente están en desarrollo 18 hospitales por contrato con el Ministerio de Salud. Desde esa cartera no contestaron a las preguntas para este artículo.
Fuente: El Mercurio