Una auditoría realizada por la Contraloría General, que abarcó el período entre enero de 2022 y mayo de 2024, detectó una serie de irregularidades en el proceso de tramitación de solicitudes recibidas por el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) con más de 3.700 casos pendientes.
En el sector privado, los timmings del CMN son vistos como uno de los principales obstáculos en la aprobación de proyectos de inversión. Un ejemplo reciente es el caso de la empresa Statkraft, que en una entrevista con La Segunda manifestó que no ha podido poner en marcha la Central Los Lagos debido a la demora en un proceso de consulta, que de manera inédita debe realizar el Consejo. También gremios como la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) o Copsa han pedido mayor celeridad en las definiciones.
Rayado de cancha
Según un documento de la Contraloría: "De las 18.540 solicitudes para autorizar la intervención en monumentos históricos, santuarios de la naturaleza, zonas típicas o pintorescas, prospecciones y/o excavaciones arqueológicas y paleontológicas, 3.752 casos estaban pendientes al 31 de mayo de 2024. De ese total, 1.395 corresponden a solicitudes de 2022, 1.652 a 2023 y 705 a 2024".
Además, se verificó que de los 18.540 requerimientos ingresados entre el 1 de enero de 2022 y el 31 de mayo de 2024, 2.532 están relacionados con obras públicas. De estas, 704 no habían sido respondidas por el CMN, incluyendo algunas que llevaban hasta 878 días sin respuesta.
Gremios aplauden
Las reacciones no tardaron en llegar. El presidente de La Cámara Chilena de la Construcción, Alfredo Echavarría fue crítico contra el papel del CMN.
"Cuesta encontrar una palabra para calificar la falta de 'eficiencia, eficacia y control" de la gestión del Consejo de Monumentos Nacionales evidenciada ahora por la Contraloría General de la República. Acumular más de 3.700 casos pendientes, algunos de los cuales llevan casi 900 días sin respuesta, es gravísimo para la inversión, el empleo, la satisfacción de necesidades sociales y el desarrollo del país', dijo el directivo.
También, el presidente de COPSA, Leonardo Daneri, comentó: "Esta auditoría ratifica algo que venimos advirtiendo hace tiempo: el Consejo de Monumentos Nacionales no tiene la capacidad para gestionar el estándar que se ha autoimpuesto, lo que, lejos de contribuir a la protección del patrimonio cultural, lo deteriora. En el proceso, también se generan enormes pérdidas y costos para las empresas y para el país".
La Contraloría solicitó al CMN elaborar un manual de procedimientos que establezca directrices para agilizar sus plazos, y deberá informar sobre los avances en un plazo de 60 días.
Fuente: La Segunda