El proyecto contempla el suministro de agua potable para el consumo humano y también para uso industrial o agrícola.
Parlamentarios de la Región de Coquimbo y expertos en infraestructura han solicitado urgencia o fast track para la construcción de la desaladora concesionada que está prevista para esa zona, una de las más afectadas por la sequía que se extiende por 15 años en el país.
Ayer se conoció que el Ministerio de Obras Públicas (MOP) presentó ante el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto "Desaladora de Coquimbo". Consiste en la construcción y operación de una planta desaladora para diferentes usos —multipropósito—, dentro de los cuales se contempla el suministro de agua potable para consumo humano y también para la utilización industrial o agrícola. La inversión señalada es de US$ 260 millones.
El plan
Según el texto ingresado en el SEIA, el proceso partirá con la captación del agua de mar, la que será impulsada y conducida desde la sentina, que se contempla ubicar en la localidad El Panul, al costado poniente de la Ruta 5 Norte; hacia la planta desaladora, que estará emplazada en la misma zona, al lado oriente de dicha carretera.
La desaladora será implementada en tres fases: primero con una producción de agua de 800 litros por segundo; luego ampliará su capacidad a 1.000 litros por segundo, y una última etapa en que alcanzará su máximo de 1.200 litros por segundo.
Se proyecta que la planta se encuentre operativa con su primera etapa a fines de 2029. Sin embargo, congresistas y expertos han advertido que la permisología, hallazgos arqueológicos o judicializaciones podrían retrasar el cronograma del Ejecutivo para desarrollar este proyecto.
Rafael Palacios, vicepresidente ejecutivo de la Asociación Chilena de Desalación y Reúso (Acades), comentó que "nos parece una excelente noticia el ingreso de la planta desaladora al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, tanto para los habitantes de Coquimbo, La Serena y Ovalle, como también para los agricultores de la región, puesto que al ser este un proyecto multipropósito le entregará seguridad hídrica tanto a las ciudades como a las actividades económicas". Añadió que "esperamos que todos los órganos del Estado con competencia ambiental que participen del proceso de evaluación puedan responder con la urgencia que el proyecto necesita para poder estar implementado a tiempo".
El MOP prevé realizar el llamado a licitación de esta iniciativa durante el cuarto trimestre de este año, para luego recibir ofertas durante el tercer trimestre de 2025 y adjudicarla en los últimos tres meses de ese ejercicio.
La licitación tendrá como antecedentes referenciales los estudios desarrollados por la empresa sanitaria Aguas del Valle.
Fuente: El Mercurio